En mi última salida pinché, la cámara tenía un diminuto agujero, eso hizo que se fuera deshinchando lentamente. Hasta el día siguiente no me dí cuenta. Entonces fui consciente de la suerte que tuve de llegar a casa. No había llevado cámara de repuesto, ni siquiera una llave allen, por si acaso se me desajustaba algún tornillo, las ganas de salir a pedalear me pudieron a sabiendas que podía quedarme tirada en cualquier lugar. Visto lo visto, hoy he ido a cambiar la cámara a Bicicletas Juan y así de paso reaprender a hacerlo yo. Me dieron un cursillo acelerado, no lo veo tan difícil, esperemos a ver cuando me llegue el momento de la práctica, espero salir airosa.A parte de la motivación, las barritas, el agua; es imprescindible la bomba de hichar, un juego de llaves allen, al menos una cámara de repuesto y parches, además de los desmontadores, un chuvas y el móvil.
Creo que no se me olvida nada.
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